viernes, junio 22, 2007

Viene de lejos buscando no sé dónde. Precisa un camino que guíe su incierto andar. Mira mis ojos; huele a almendra. No quiere cambiar de ropa pero tiene frío. Permite que se cuele una débil metáfora del amor. Quizás pierda su tiempo, pero nunca su lugar. Ya está anclado en el recuerdo porque está en el presente. Este es el instante que veo su cuerpo dormido en mi espalda pidiendo mar, pidiendo lluvia. Es agua lo que corre bajo esa luz. Peces que no olvidan su fresco andar. Es ahora cuando pido. Es ahora que me pierdo.

No hay comentarios.: