miércoles, julio 18, 2007

un puente de peces dulces
en sus ojos las entrañas de un deseo irrepetible.
sabor de invierno, palabras calladas en la boca del enfermo.

La calle incierta se rehacía en cada paso queriendo desaparecer fundida con el río azul de la insistencia.

Pide perder un poco de inocencia.
Pido paredes de lata para que hagan ruido cuando venga.

Vengo mis deseos sin lengua.
Vengo de pescar en tus ojos dos infiernos.
Vengo sin poder ir porque si voy lo pierdo.

Pierdo su mueca aciaga
su mal recuerdo
Sus escamas plateadas
nadan en la sopa con sabor a incesto

Esta incontinencia de amor
guardada en el vaso del cepillo de dientes
vientres mentolados y
algas huérfanas

Ardor infame
funesto

1 comentario:

Unknown dijo...

una marea encendiendo el parque,
la noche llenado la piscina de tu único pez,
te muerde,
el aire se asfixia y te observa,
saltas del agua,
muerdes,
una gota va tapando la estrella,
el día atrae las nuevas sombras,
despiertas,
las cortinas ventilan el último suspiro,
una imagen se derrite en el silencio en tus pupilas
y callas.